Hay tanto que no se de astrofisica...

Bienvenidos mis cuatro lectores. Nuevamente estamos en esta su sección literaria de la madriguera, esta noche vamos a variar el genero a tratar, pues este año hemos visto ya cuatro libros y todos han sido de literatura fantastica. Esta vez toca el turno a la ciencia y estamos aquí para presentarles una obra de Stephen Hawking.

Homero Simpson ya lo dijo sabiamente una vez

"Hay tanto que no sé de astrofísica. Debí haber leído el libro del paralítico ése."
-- Homero Simpson --

Por su puesto yo no quiero que me pase lo mismo y estoy empezando a leer su libro titulado Historia del Tiempo: Del big bang a los agujeros negros. Esta obra es un libro de divulgación cientifica publicado en 1988 que se convirtio en un best seller debido a su lenguaje al alcance de los simples mortales que lo hace comprensible y hasta ameno para el lector común. En una nota del autor incluida al principio del libro nos dice que su idea era no incluir ninguna ecuación y casi lo logro, pues todo el libro solo tiene una, esta E=mc² y lo demas son ejemplos más o menos practicos de los conceptos a tratar, por dificil que esto halla sido para Hawking. Su principal objetivo es dar una visión general del tema pero, inusual para un libro de divulgación, también intenta explicar algo de matemáticas complejas.

El libro da un breve recorrido por las ideas sobre el espacio y el tiempo desde la epoca de los filosos griegos clasicos como Aristoteles hasta el siglo XX para luego meterse de lleno en las explicaciones de que es el universo en base a las teorias de la gravitación y movimiento de Newton, la relatividad general y la fisica cuantica, buscando aclarar que seria que seria la teoría unificada de la fisica que se busca desde los días de Einstein y aun no lograda.

Hawking se concentra en preguntas como ¿Cuál es la naturaleza del tiempo? ¿Hubo un principio o habrá un final en el tiempo? ¿Es infinito el universo o tienen límites? ¿puede el universo ser un continuum sin principio ni fronteras? y en base a ellas engancha la atención del lector.