Buenas noches mis estimados cuatro lectores. Hoy presentamos la quinta parte de la cada vez más mal llamada trilogía de La teoría del Blog, dedicada a la blogosfera, es decir a esta parte de internet compuesta por los blogs y las relaciones entre ellos.
Los ultimos dos días he pensado de una manera más especifica en mi blog y yo, motivado en las ultimas dos entradas de los siete infiernos donde Fire Tony habla a su manera sobre la blogología. Así pues comienzo a relatar a ustedes mis cuatro lectores los resultados de mis propios pensamientos al respecto.
Los blogs personales son un espejo de lo que el autor es o quiere hacer creer a los lectores que es. Estos son los ladrillos de la blogosfera. Yo opino que lo más sano es una cierta interacción entre ellos como la que hay entre los individuos en la vida real pues la diferencia que hace deseable a una publicación en internet respecto a un medio tradicional es lo facil, inmediato y omnipresente de la interactividad, es decir, que cualquiera sin importar donde este tenga la posibilidad de responder de inmediato. Las citas directas, los comentarios y los enlaces a otros blogs crean estas relaciones presentando al lector lo que el autor lee o dice leer.
Lo mejor es la modesta mediania, ni aislarse del resto ni convertirse en un simple catalogo de enlaces. Esto de los blogs evoluciona de acuerdo a los usuarios que los crean, pues así como el blog personal es reflejo de su dueño o de sus aspiraciones y gustos, así también la blogosfera en conjunto es un reflejo de la comunidad que la creo y cambian a la par.
Suena bonito pero es utopico porque la gente es muy perezosa. Muchas veces la gente deja morir su blog o no comenta en otros por pereza. Es gente que aun sigue leyendo entradas en sus enlaces habituales pero es solo una visita anonima. Basta comparar la cantidad de visitas con la cantidad de comentarios que tienen los blogs para darse cuenta. La falta de tiempo o la urgencia de encontrar un dato también contribuyen a eso como un simple "ya lei lo que queria, ahora me voy" que en nada contribuye al enlace entre la blogosfera. La falta de tiempo también contribuye mucho pues llega el momento en que uno no puede mirar más enlaces -o a escribir siquiera en su propio blog- que los que la rutina permite a nosotros los simples mortales.
Por eso yo NO creo que la cantidad de comentarios recibidos como una medida confiable de exito de un blog, pues generalmente quien comenta tiene una cierta familiaridad con el autor por alguna razón, por lo tanto me parece que es mejor como medida la base de fans del autor. Miren ¿Cuantas veces no han entrado ustedes a un blog sin comentarlo o visitado foros sin registrarse? Ese es el comportamiento más común pero las visitas siguen llegando si la información vale la pena. Ademas influyen otros factores en la cantidad de comentarios como el interes en si de la nota y el tiempo de publicación entre entradas, pues una nota nueva eclipsa a la anterior, pero mucho tiempo entre actualizaciones desanima a los usuarios constantes.
Aun así toda medida es subjetiva y en realidad debe apegarse al objetivo del blog y cual necesidad del autor cubra. En mi caso es la de compartir mis inquietudes de forma libre a quien quiera leer.
La blogosfera sufre un mal extendido a todos los campos... las masas que vulgarizan y vuelven vacio todo lo que tocan. Basta con mirar toda la basura que es popular entre la borregada. En el caso de los blogs se ve en las redes comerciales de hosting donde la gente de la borregada toma un hosting simple para llenar de fotos e intercambiarse comentarios vacios en una especie de 69 virtual rodeado de la publicidad que paga el host.
Por hoy es todo y nos leemos luego. Mañana es el Anime Holic 3 y si Jehová lo permite estare ahí.
Presupuestos, oh presupuestos. En algunos casos provocan el efecto Fly, en otros casos la falta de más ideas... aunque en el segundo caso a veces es mejor eso que usar relleno.
